Atardecer

No existen personas realmente malas.
O son enfermas, o simplemente
ignoran la ley suprema de que
recibimos aquello que damos.

El enfermo requiere curación.
El que hace el mal necesita la luz.
Pero no podemos, de ninguna manera,
obrar con odio y maldad.

Esfuérzate por dar a los demás
la enseñanza de tu ejemplo,
para que entienda que la maldad
es una situación transitoria.


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